Un escape room, sala de escape o cuarto de escape es un juego de aventura físico y mental que consiste en encerrar a un grupo de jugadores en una habitación, donde deberán solucionar enigmas y rompecabezas de todo tipo para ir desenlazando una historia y conseguir escapar antes de que finalice el tiempo disponible. (Wikipedia)

La puerta de salida siempre permanecerá abierta, en ningún momento del juego se cerrarán las puertas por las que vayáis avanzando, cumpliendo con la normativa de seguridad, con lo que en caso de necesitar salir a la calle simplemente podréis abrir la puerta cuando lo deseéis.

Por el tamaño de la sala y la distribución de los puzzles, consideramos que 5 es el número máximo de personas que podemos aceptar para que el juego fluya de manera adecuada. En cuanto al mínimo, 2 es el menor número de personas que podrán participar.

Al igual que puede suceder en otras actividades (un concierto, una película, un avión,…) el tema de la puntualidad es básico para el buen desarrollo de la actividad. Las horas de las reservas están dispuestas de manera que se pueda dedicar una atención óptima a cada grupo, por lo que no se puede retrasar el inicio de cada reserva.

Una vez que sea la hora, la cuenta atrás comenzará y se irá descontando tiempo al grupo. Si dicho tiempo descontado alcanzase los 15 minutos se dará la reserva por perdida y no se reembolsará el importe de la misma.

Consideramos que los niñ@s a partir de 12 años pueden participar en el juego, siempre que vayan acompañados por alguna persona adulta. Es posible que en un futuro se habilite una versión Junior, en cuyo caso sería anunciada.

Si bien la historia transcurre en un laboratorio en el que han surgido Zombies, podéis estar tranquilos ya que no tendréis que encontraros con ninguno de ellos… al menos vivo.

NO HAY SUSTOS